Costa Rica ya dispone de una nueva categoría denominada Parques Naturales Urbanos (PANU), creada para conservar ecosistemas, bosques ciudadanos en riesgo además de promover la salud física y mental de las personas.

El anuncio se hizo en el Parque Ecológico La Colina de Curridabat, por el presidente de la República, Carlos Alvarado y la ministra de Ambiente y Energía, Andrea Meza.

La actividad, desarrollada en el marco del segundo aniversario del Plan Nacional de Descarbonización, contó con la presencia además del Representante Residente de PNUD en Costa Rica, José Vicente Troya, el alcalde de Curridabat, Jimmy Cruz, así como de ministros y diputados de la República.

Liderada por el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, la iniciativa busca preservar hábitats remanentes, capturar carbono, estimular la recreación y ecoturismo; propiciar la conectividad biológica con la trama verde de la ciudad y sus ríos, y prevenir desastres naturales.

De esta forma, a partir de hoy el país cuenta con un sólido sistema de áreas protegidas con 10 categorías de manejo. Luego de crearse la primera Área Silvestre Protegida (ASP) en 1963, la conservación se concentró en la protección de las riquezas naturales en entornos rurales. Ninguna de las categorías existentes hasta ahora consideraba las necesidades de espacios naturales urbanos.

“Esta nueva categoría de manejo permitirá enfocar las estrategias de conservación en las necesidades específicas que tienen los espacios amenazados por el crecimiento urbano no planificado. Es parte de los esfuerzos por subsanar la deuda histórica que tiene el país con la protección medioambiental en las ciudades”, dijo el Alvarado.